El mundo del automovilismo y la mecánica guarda un sinfín de herramientas útiles para un conglomerado de situaciones. Sin embargo, hay un artefacto que es indispensable para conductores, personal de grúas viales y mecánicos, hablamos del gato hidráulico y seguramente este nos ha salvado a todos en más de una ocasión.
Uno de los peores enemigos de todo buen conductor es el caucho pinchado, este tipo de situaciones puede paralizar a cualquiera en el acto. Lo peor es que una rueda puede presentar este tipo de problemas en medio de un viaje por carretera, en un bosque en medio de la noche o antes de llegar a una reunión importante.
Los accidentes no tienen hora o fecha en el calendario y sabiendo que pueden ocurrir en cualquier momento lo mejor es estar preparados. El gato hidráulico es nuestra herramienta ideal en caso de cualquier imprevisto, es como contar con un compañero que nos ayude a soportar el coche cuando debemos hacer el cambio de caucho.
Úsalo adecuadamente
Se trata de una herramienta resistente, manejable y te dará el soporte necesario para salir de tu complicación, pero está en tus manos hacer un uso adecuado de ella. Lo primero es evitar utilizarla en un terreno inestable o inclinado, así que si estas en una pendiente lo mejor es tratar de empujar tú coche hasta tierra firme.
Otro consejo es utilizar objetos pesados para colocarlos detrás de las ruedas traseras para evitar el movimiento. Esta es una previsión que puede salvarte de accidentes graves a la hora de hacer el cambio de la llanta.
Spray para cauchos pinchados
A finales del siglo pasado las empresas encargadas de la producciòn y comercialización de los coches comenzaron a incorporar spray que rellenan el caucho, pudiendo ser utilizados por un tiempo limitado.
El problema con este producto es que nos provee de una solución temporal, luego de echarlo podrías durar conduciendo hasta unos 80 kilómetros hasta llegar a un taller mecánico.
La mejor opción es evitar la dependencia y aprender a cambiar el caucho. Para eso solo debes contar con algunas llaves para desenroscar tornillos y un gato hidráulico. Y si el que tenías se encuentra averiado puedes recurrir a una comercializadora especializada. El coste de este producto es realmente bajo.